Abres la tienda, la tiras al aire y ale hop! Ya está montada. Qué fácil resulta ahora… Pero, ¿Qué ha pasado con las canadienses de toda la vida?
Cuerdas y vientos que se liaban, las piquetas torcidas, el martillo que no aparecía nunca… Un campista como es debido tiene que saberlo todo sobre este tipo de tiendas y sobre todo, cómo montarlas.
¿Sabías que las tiendas de campaña canadienses tienen de 4 a 5 partes? La estructura, que le da forma y fortaleza; las piquetas, que afirman la tienda y los vientos en el suelo que son las cuerdas tensadas unidas a la tienda y al suelo que la inmovilizan y la ayudan a que el agua de la lluvia deslice mejor; y por último el cuerpo, que es donde descansaremos cuando la tengamos montada. El cuerpo puede tener ventanas, puertas con cremallera o bolsillos para guardar las cosas. Algunas tienen un doble tejado para proteger la tienda del solo y de la lluvia.
Ahora que sabemos las partes que tiene una tienda,tendremos que recordar algunos aspectos obvios antes de montarla. Necesitamos un terreno limpio, seco y sin inclinación, lejos de árboles y grandes piedras para proteger la que será nuestra futura casa durante unos días. La puerta de la tienda siempre tiene que estar en la dirección en la que corre el viento, y si nos proponemos montarla a las horas de más calor no se tienen que tensar demasiado los vientos porque la humedad de la noche hará de las suyas. Las piquetas tienen que formar 45º con el suelo.
¡Ahora pasamos a la acción!
- Extiende el cuerpo de la tienda. Alísalo el máximo posible y recuerda que la orientación de la puerta depende de la dirección del viento.
- Fija el suelo con las piquetas. Para hacerlo primero se fijan las esquinas en diagonal y después las intermedias. Se tienen que clavar tensadas en el suelo, pero tampoco tiene que ser excesivo.
- Una vez esté fijado, empezaremos a colocar los tubos y elevar el cuerpo de la tienda.
- Ya tenemos la estructura creada. A continuación, clavamos el resto de piquetas, siempre en diagonal y colocamos los vientos y el doble tejado. Tenemos que tenerlo en cuenta a la hora de tensar los vientos y las piquetas, puesto que éste tiene que guardar simetría.
- Una vez tenemos la tienda montada ponemos el doble tejado. Lo extenderemos sobre el cuerpo de la tienda y lo fijaremos con piquetas y vientos, de forma que no quede ninguna arruga. Tiene que haber separación entre el doble tejado y el cuerpo de la tienda para que sea efectivo.
- Finalmente, fijamos los vientos frontales y posteriores sin tensarlos demasiado.
- Una vez hayamos acabado entraremos en la tienda, siempre descalzos, y comprobaremos que no hay arrugas. Si hay, se tienen que tensar más los vientos secundarios.
- Recuerda hacer regatas alrededor… ¡No es la primera vez que se tiene que salir en plena lluvia porque se está inundando la tienda!
Ahora que ya tienes la tienda montada sólo queda disfrutar de la estancia en tu camping preferido del Prepirineo y Pirineoo de Lleida.